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10 cosas que hacer en un fin de semana en Taxco, Guerrero

Desde hace un buen tiempo, tenía muchas ganas de visitar Taxco, uno de los Pueblos Mágicos de México, en el estado de Guerrero. Aproveché un “puente” o fin de semana “largo”, me monté en un autobús desde la Terminal del Norte de la Ciudad de México, y en dos horas y media, llegué a este destino que, les adelanto, desde ya es uno de los lugares más bonitos que he visitado en México.

Aquí te dejo recomendaciones para disfrutar de un súper fin de semana en Taxco.

1. Comienza tu día con un buen desayuno en el Mercado de Taxco

Como seguro ya te has dado cuenta, me encanta visitar y comer en los mercados de México, porque es una forma segura, asequible y fácil de disfrutar de la gastronomía local. Una gran recomendación es probar la barbacoa de Taxco, que a diferencia de la famosa barbacoa de Hidalgo, es de chivo. La barbacoa se suele comer de desayuno, por lo que fui a disfrutar de unos buenos tacos para comenzar bien el día. Si vas, busca el puesto de “Chucho Guisados”. No te vas a arrepentir.

2. Camina por las calles de Taxco 

Recorrer las calles de Taxco, con sus casas con techos de teja y pintadas de blanco, es imperdible. Además, es una tremenda locación para tomar muchísimas fotos preciosas. Como fácil te podrías pasar algunas horas en esto, te recomiendo aprovechar la mañana, con la luz natural.

3. Descubre la única mina prehispánica de México (o por lo menos, eso dicen)

La Mina de Taxco es un yacimiento prehispánico, ubicado bajo el Hotel Mission. Según investigaciones, se cree que esta mina fue usada por el pueblo chontal, originario de esta zona de México, pero que, a la llegada de los colonizadores españoles a esta zona, fue cerrada y escondida por esta comunidad para evitar su destrucción. Fue descubierta hace apenas 7 años.

Aquí, puedes ver oro, plata y hierro brutos, sin explotar. Habiendo visitado otras minas, esto le da un toque diferente.

La visita cuesta $150 pesos mexicanos por persona y te incluye un paseo guiado por la mina, que está muy bien conservada, y una bebida de cortesía en la terraza del hotel, con una súper vista de Taxco. Yo recomiendo tomar el cóctel minero, a base de mezcal guerrerense  😉

4. Sube la torre del Templo de Santa Prisca para una vista 360 de Taxco

El Templo de Santa Prisca es la joya de Taxco. Fue construida por José de la Borda, un empresario minero muy próspero del lugar. José, aparentemente, era muy devoto, por lo que consagró su riqueza a la construcción de este enorme templo en un tiempo exprés: 7 años. Obviamente, el tipo quebró en el proceso, pero dejó atrás esta belleza arquitectónica. 

Tienes la opción de visitar su interior, igual de impresionante que el exterior, y con el mismo ticket, puedes subir una de sus torres para tener una de las mejores vistas de la ciudad. Recomiendo hacerlo cerca del mediodía y ojalá te toque un día claro, para que puedas ver hasta los pueblos cercanos.

5. Y luego, visita una de las terrazas del centro para unas vistas espectaculares

Taxco es una ciudad con muchas colinas y, como mencioné antes, ofrece vistas muy bonitas. Después de caminar por todas sus callecitas, puedes refrescarte en alguna de sus terrazas, como la del restaurante Rosa Amaranto, la del Hotel Agua Escondida o la terraza del restaurante La Parroquia.

Vista desde “La Parroquia”, donde me tomé una rica paloma como premio por subir esa torre y sus más de 200 escalones.
Vista desde “Rosa Amaranto”, que también es un hotel muy bonito.

6. Prueba el típico pozole verde guerrerense y el mole rosa

No te puedes ir de Taxco sin probar el tradicional pozole verde, una sopa o caldo hecho con granos de maíz, cerdo o pollo y otros ingredientes. Para darle el característico toque verde, se usan semillas de calabaza y chiles. Te recomiendo ir a la Pozolería de la Tía Calla del Zócalo, pero ojo, si vas un jueves, debes ir temprano, pues en todo Guerrero, este es el día “pozolero” y se acaba rápido. 

Otro platillo de la gastronomía local es el mole rosa, una reinterpretación de esta preparación emblemática de México. Para darle el tono rosáceo, se usan ingredientes como piñón rosa y remolacha. Puedes probarlo en el restaurante Rosa Amaranto y aprovechar sus vistas desde la terraza.

7. Hazte tu propio anillo de plata y compra en el tianguis 

La historia de Taxco está muy vinculada con la explotación de la plata, pues esta fue una de las zonas mineras más importantes de la Nueva España. Por su historia y la gran habilidad de sus maestros plateros, que han ganado reconocimiento mundial, Taxco es un gran lugar para comprar joyería de plata muy bonita y a precios muy asequibles. 

Puedes aprovechar el mercado o tianguis de plata que se coloca cada sábado, desde las 7 am hasta las 5pm, frente a la terminal de autobuses. También puedes ubicar alguno de los puestos cooperativos del centro, que son locales alquilados por varias familias artesanas, comparten los costos, y ofrecen sus piezas en puestos individuales. 

Hicimos estos anillos desde cero y fue una experiencia chulísima. 

También puedes hacerte tu propia pieza de plata, con un maestro platero que te guía paso por paso, derritiendo la plata, tallándola, dándole forma y, finalmente, poniéndole los detalles que quieras. Te recomiendo hacer esta experiencia con Gustavo, quien te lleva a su propio taller. Puedes reservar por WhatsApp: +52 1 762 106 2387

8. Visita alguno de los museos y toma un tour guiado

A pesar de no ser una gran urbe, Taxco tiene mucha historia, y puedes conocer un poco más de ella a través de los pequeños museos que ofrece. A mí me gustó bastante la Casa Humbolt, nombrada así en honor de que Alejandro Humbolt se hospedó aquí durante su viaje a México, en 1803. Es un museo de arte virreinal, con visitas guiadas muy buenas. Además, la arquitectura de la casa es muy bonita. También está la Casa Borda y el Museo Spratling, en honor a William Spratling, un empresario estadounidense que muchos locales consideran como el precursor de las técnicas de platería que hoy dan tanta fama a Taxco.

También puedes hacer una visita guiada por todo el Pueblo Mágico con un guía certificado. Ya saben que me encanta aprender sobre la historia y costumbres de los lugares que visito, así que siempre trato de tomar estos tours. Te recomiendo muchísimo reservar con uno de los guías que están en el Zócalo, frente al Templo. Cuestan alrededor de $100-$120 pesos mexicanos por persona y duran de 1 hora y media a 2 horas y media, dependiendo.

9. Sube al Cristo en un Beetle 

Una cosa muy emblemática de todo Taxco es que está lleno de Beetles. Sí: casi todos los taxis son Volkswagen Beetles blancos. Es una vista muy curiosa y pues, ¿qué tan común es que te puedas montar en un Beetle clásico? Aprovecha para hacerlo aquí y sube hasta el Cristo de Taxco, que está sobre uno de los cerros más altos de la ciudad. Dicen que este Cristo es tan grande como el de Sao Paulo… No lo sé, pero en todo caso, vale la pena subir hasta aquí, por la vista.

10. Conoce las Pozas Azules, las Grutas de Cacahuamilpa o las Mil Cascadas

Taxco también ofrece algunas opciones de ecoturismo muy interesantes, que dejé para una próxima visita. Estas atracciones naturales incluyen las Pozas Azules, un conjunto de ojos de agua con un característico tono azul; las Grutas de Cacahuamilpa, con enormes formaciones geológicas; y las Mil Cascadas o Cascadas Las Granadas. Todas están a menos de 2 horas de distancia de Taxco, en carro.

Así que, ya sabes: si quieres un destino bueno, bonito y asequible para visitar desde la Ciudad de México, con una buena oferta de actividades, Taxco es una gran opción. Cuéntame en los comentarios si te sirve esta guía o si tienes más recomendaciones, para incluirlas en mi próxima visita.