Una de las cosas que más me emocionaba de mi viaje por Yucatán, era visitar las 3 principales ciudades-nación del imperio maya que se encuentran en este estado: Uxmal, Mayapán y la gran Chichén Itzá. Luego de visitar Izamal y Valladolid, nos dispusimos a visitar esta gran reserva arqueológica para completar nuestro recorrido.
Chichén Itzá significa “boca del pozo de los itzaes” en maya y fue fundada alrededor del año 500 después de Cristo. Como referencia, Uxmal y Chichén Itzá crecieron en poderío y alcance durante periodos similares, mientras que Mayapán vino después del abandono de Chichén Itzá.
Chichén Itzá es una de las 7 maravillas del mundo. Por su importancia, recibe millones de visitas cada año. Visitar esta reserva con éxito fue un desafío, pero lo logramos. Aquí te cuento mi experiencia con algunas recomendaciones para que tu visita sea igual de exitosa.
Cómo visitar Chichén Itzá
Dentro de Chichén Itzá, se pueden apreciar, aproximadamente, 34 puntos de interés, lo que quiere decir que es extensa. Por esto, y por la cantidad de gente que la visita diariamente, es muy importante visitarla lo más temprano posible. Se puede acceder al complejo desde las 8:00 am. Yo recomiendo llegar antes de las 11:00 am, para evitar los buses repletos de turistas que llegan desde Cancún y otros puntos de la península de Yucatán.
Para poder llegar temprano cómodamente, la noche anterior dormimos en un hotelito en Pisté, el poblado más cercano. Llegamos a Chichén Itzá alrededor de las 8:30am: encontramos parqueo dentro del complejo por un costo de $80.00 pesos mexicanos y no tuvimos que hacer filas. Llegar temprano también es beneficioso si quieres tomarte fotos con poca gente.
Al entrar al recinto, verás la boletería inmediatamente. Cuando fuimos, en mayo de 2021, la entrada para personas extranjeras costaba $497.00 pesos mexicanos y para personas mexicanas o residentes, $210.00 pesos mexicanos. Pero, si eres persona mexicana o residente, los domingos puedes entrar GRA-TO-LAS. Sí, gratis. Así, nos economizamos una entrada y compensamos los costos. Puedes pagar tus taquillas con tarjetas o en efectivo.
Una de las principales dudas, al visitar zonas arqueológicas, es si vale la pena contratar una visita guiada. Como les conté de mi experiencia en Uxmal, creo que es mejor hacerlo, porque las explicaciones enriquecen muchísimo tu experiencia. La guía te ayuda a ver lo que tienes que ver y entender la historia detrás de todo.
Ahora bien, las visitas guiadas en recintos tan emblemáticos como este, pueden ser costosas. En Chichén Itzá, rondan los $900 pesos mexicanos por visita, pero la puedes compartir con un grupo de hasta 6 personas, para que te salga más barato. Yo opté por visitar usando la app oficial que el Instituto Nacional de Historia y Antropología ha creado para hacer el lugar más accesible para todas las personas.
Nos tomó casi 4 horas recorrer todo Chichén Itzá. Como es muy grande y vas a querer tomar muchas fotos, te cuento cuáles son los imperdibles de tu visita, para que no te vayas sin haberlos apreciado (y fotografiado 😉 ):
Qué ver en Chichén Itzá
Una vez pases la boletería, caminarás un sendero ancho que te va a llevar directamente a la joya de Chichén Itzá: el Templo o Castillo de Kukulkán. Se construyó evocando el calendario maya, ya que cada peldaño representa un día del año, hasta llegar a la cúspide, para un total de 365 días. En los equinoccios de primavera y otoño, las sombras de los peldaños dibujan una serpiente -símbolo preciado de la cultura maya- a los costados de la edificación. Estas maravillas ya existían antes de la colonización española, imagínate.
El Templo de Kukulkán marcaba el centro de la vida religiosa y política de la ciudad. A los márgenes, puedes encontrar varios templos. Para mí, el más impresionante es el Templo de los Guerreros, con sus mascarones o “caretas” dedicadas a los dioses Chaac (de la lluvia) y Kukulkán. Justo al lado, está la Explanada de las Mil Columnas.
Otra joya que no te puedes perder es la explanada del Juego de Pelota o “Pok Ta Pok”. En la cultura maya, este juego tenía un valor sumamente importante e incluso, podía usarse para tomar decisiones trascendentales para la ciudad-nación. La de Uxmal es bonita, pero la de Chichén Itzá es la más grande y la mejor conservada de todo el sur de México y Centroamérica.
Un testamento de los grandes saberes de la cultura maya, además del Castillo, es el Observatorio o Caracol. Desde aquí, se observaban planetas y estrellas muy importantes para la cultura maya, como Venus. Aunque me impresionó más el de Mayapán, cuando pienso en la relación que seguramente hubo entre el diseño del Castillo y los saberes que salieron de este Observatorio, me quedo sumamente sorprendida.
Y finalmente, no te puedes ir sin visitar el Cenote Sagrado, la mismísima razón detrás del nombre de Chichén Itzá. Cuando fuimos a Homún, algunos locales nos contaron su decepción porque este cenote, que debería ser azul como los demás, es verdoso y “triste”, alegadamente, porque no se respetó y se extrajeron múltiples piezas importantes de sus entrañas que fueron arrojadas por la comunidad maya, como parte de sus rituales sagrados.
Una vez cubras estos puntos, si te queda tiempo, explora las demás áreas de la ciudad. Hay edificaciones sumamente impresionantes, por los detalles de sus tallados, por ejemplo:
Aquí te dejo unas recomendaciones adicionales para ayudar a planificar tu visita:
- Mentalízate para encontrarte con un recinto lleno de vendedores. Los corredores de Chichén Itzá son ocupados por personas de la localidad que venden souvenirs y otras cosas. De eso viven, así que no hay más que caminar alrededor sabiendo que muchas personas te van a ofrecer el mismo producto, una detrás de la otra. A la hora que llegamos, apenas estaban entrando, así que es una razón más para llegar temprano, antes de que se instalen.
- Lleva suficiente agua y snacks para tu recorrido. Aunque hay donde comprar, no es tan cómodo devolverse cuando ya vas avanzando en tu paseo. Como puedes entrar con bolsas y mochilas pequeñas, mejor ve preparada con lo que te haga falta. Yo me llevé 2 litros de agua, que nos acabamos.
- Si, cuando visites, todavía hay restricciones por la COVID-19, te recomiendo llevar tu cubrebocas o mascarilla de tela y uno de repuesto, por si se te ensucia, se cae o lo pierdes. Ah, también lleva gel antibacterial.
- Sin importar a qué hora visites, lleva gorra o sombrero, ponte protector solar y, por qué no, llévate un pañuelo, por si quieres secarte el sudor.
Definitivamente, un viaje a Yucatán o a Quintana Roo no está completo sin una parada en esta maravilla de la arquitectura. Si fuiste a Chichén Itzá y estos tips te ayudaron, ¡cuéntame! Me alegrará mucho saber que te fueron de utilidad. Y tienes otros consejos, compártelos conmigo en los comentarios.
Gracias por los tips!! que fotos tan chingonas <3 Mucho amor en este post
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